Se conoce como "broncoespasmo inducido por ejercicio" (BIE) a una disminución temporaria del calibre de las vías aéreas (broncoespasmo) secundaria a la realización de una actividad física vigorosa.
Síntomas de BIE
Sibilancias.
Disnea.
Tos (durante o después del partido).
Dolor torácico.
Cansancio precoz.
Otras manifestaciones frecuentemente referidas en consultorio y a menudo interpretadas como secundarias a la "falta de entrenamiento" son:
- "me quedo sin aliento"
- "me canso enseguida"
- "abandono antes que mis compañeros"
- "me pasa si corro, pero no cuando hago natación"
- "no puedo correr más de 5 minutos sin parar"
- "comienzo a toser cuando vengo de jugar afuera"
Generalmente el BIE se establece durante o inmediatamente después de una actividad vigorosa. La forma típica se inicia después de finalizada la actividad física; sin embargo el BIE puede comenzar durante el ejercicio, dentro de los 10 minutos de iniciada la actividad. El BIE alcanza un pico a los 5-10 minutos después del ejercicio, y dura alrededor de 20-30 minutos.
Puede o no ocurrir una fase tardía, donde los síntomas reaparecen, 12 a 16 horas después del ejercicio, y generalmente se resuelven en 24 horas. Normalmente se autolimita, ya que la liberación de epinefrina, norepinefrina o ambas actúan como broncodilatadores naturales.
Nivel de control de asma: Un adecuado control del asma implica que el niño esté virtualmente asintomático, aún durante el ejercicio. La mayoría de los niños asmáticos necesitan regularmente medicación para tratar la inflamación de la vía aérea. . El ejercicio puede ser el único factor precipitante de asma en algunos pacientes y de este modo actúa como un "marcador"que revela un manejo inadecuado de la enfermedad.
El BIE se establece frecuentemente con la realización de deportes aeróbicos, que requieren un esfuerzo continuo y prolongado, demandando una respiración rápida y profunda. En general, cuanto más intenso es el deporte, más severo puede llegar a ser el broncoespasmo.
El principal objetivo en el manejo de BIE, es permitir que el paciente realice el deporte que más le gusta sin episodios de broncoespasmo. El uso de medicación previo a la realización de un ejercicio vigoroso puede ayudar a prevenir el BIE. Pueden utilizarse broncodilatadores inhalatorios, los que mantienen su efecto durante 4 a 6 horas.
Recomendaciones:
- Tomar la o las medicinas indicadas por el médico antes de la actividad física (en el vestuario antes de cambiarse).
- Realizar un calentamiento prolongado y progresivo.
- Tratar que el ejercicio se haga a intervalos.
- No realizar ejercicios máximos en intensidad.
- Si es posible, son más beneficiosos los deportes en ambientes calientes y húmedos.
- Cuando sea posible intentar respirar por la nariz
- Llevar la medicación broncolidatadora de acción rápida en la bolsa de deporte de siempre.
¿Que pasa si se inicia una crisis en el ejercicio ?
- Procurar tener calma. Si se han realizado la normas básicas, la crisis no debe ser muy fuerte.
- Dejar de hacer ejercicio.
- Permitir que se pueda respirar bien. Los compañeros no deben situarse alrededor de la persona que tiene el ataque
- Tomar las medicinas broncodilatadoras lo antes posible.
- Iniciar la respiración silbante. Fruncir los labios como si se fuera a silbar. Este tipo de respiración permite que el aire pueda salir de los pulmones y evita que se respire rápido y superficial, y que el pecho se "hinche".
- Cuando se solucione la crisis, tratar de volver de nuevo a la clase para terminarla si no se está muy cansado, pero hacer el ejercicio de manera más suave.
- Si el paciente no se recupera como en otras ocasiones se debe tomar otra dosis de broncodilatador y consultar a un médico o acudir a un centro sanitario.
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